Circo, un tesoro en el 1 de Regueros
Mientras estudiaba, comenzó a forjar lo que pronto vendría a llamarse Circo. Durante este proceso, Almudena Gil, esencia de Circo Jewellery, testaba su primeras creaciones en su época de estudiante. De aquello hace ya casi 15 años y ahora Circo vende en distintos países de Europa y, además, nos recibe en el número 1 de la calle Regueros. Quien visita Circo descubre la esencia de Salesas, y es que el local en el que se ubica esta marca de joyas artesanas, parece enmarcado en un Madrid secreto, un Madrid por descubrir.
“Empecé a hacer una bisutería que tiene bastante de fantasía y aún conserva esa esencia de un mundo fantástico en el que los animales se juntan con estrellas”, nos cuenta Almudena mientras uno se siente como en casa en este local a ras de suelo, que permite espiar Salesas (casi sin ser visto) y que al tiempo te hace sentir la exclusividad de un espacio único. Y es que Circo es precisamente eso, un nombre que evoca la imaginación y fantasía que presentan las piezas artesanas de Almudena.
Personalidad vintage
El permanente proceso creativo, en el que está inmersa Almudena, hace que la inspiración le venga de diferentes fuentes creativas y momentos como exposiciones de arte, Pinterest, el séptimo arte… “la inspiración está en todas partes. Vas recogiendo todas las referencias, las almacenas en tu cabeza y, llegado el momento vas definiendo por donde trabajar en cada colección. Me gusta mucho el toque vintage que tienen mis piezas, utilizo el latón porque me resulta evocador a las piezas antiguas, por el color que coge cuando se oxida… siempre me ha interesado mucho la estética del Art Decó y las antigüedades”.
#HandMadeInSpain
Una vez decidida la temática de la colección en la que va a trabajar Circo, comienza el trabajo con cera para plasmar esos dibujos que tiene en la cabeza Almudena y cuyo resultado podemos ver en su espacio de Regueros, 1. A través de la técnica de la cera perdida, el metal va cobrando forma para poder ser retocada hasta tener completado el original de la pieza final.
Circo, un espectro infinito
“Quiero pensar que desde niñas de 15-16 años, que han descubierto la marca por su madre, hasta maravillosas señoras que tienen 70, todas con estilos muy diferentes, aprecian y tienen curiosidad por las artes plásticas”. Y es que las personas que visitan el estudio de la calle Regueros, ya suelen conocer la marca o vienen recomendadas por otras amigas: “las clientas de Circo son súper fieles, incluso son coleccionistas y tienen más Circos que yo misma”, nos desvela Almudena. “Me gusta mucho porque les han dicho o vienen con el convencimiento de que aquí, en Circo, pueden encontrar algo diferente o especial”.
Las piezas de Circo tienen una impronta que las hace muy reconocibles y les da un toque diferente, reflejo de la personalidad de Almudena Gil. “Tienen un poco ese punto que te puede recordar una joya antigua pero con un toque actual. De repente tienen un punto elegante y macarra a la vez. Tienen rasgos de mi forma de ver las cosas”.
Sobre Salesas
“Acabé en Salesas por casualidad hace 12 años, el edificio en el que estoy me pareció impresionante y así llegamos al semisótano en el que estamos. Salesas se ha ido convirtiendo en un barrio muy interesante, con comercios que se salen de lo mainstream y buscan un poco más el detalle, el encontrar un producto un poco más especial… y al final eso genera un ambiente muy acogedor y agradable de vivir y pasear. Salesas es un barrio muy cálido”.
Un rincón para perderte por Salesas
“Cualquiera de las calles de Salesas tiene mucho encanto. Me gusta mucho este tramo de la calle Pelayo, la calle Piamonte… ¡Cualquiera! Más que un rincón para perderte por Salesas, lo ideal es perderte por el Barrio de Salesas y encontrar sus tesoro.
